Un problema muy frecuente, de causa multifactorial, y de abordaje complejo. La promoción de estilos de vida saludables, desde la visión integral del ser humano; así como el establecimiento de programas de prevención dirigidos a lograr "Familias Fuertes", deben ser parte de las estrategias consideradas para eliminar este flagelo social. Un mundo sin violencia va a requerir que los niños crezcan y se desarrollen en el seno de familias y comunidades sin violencia, con acceso universal y equitativo a servicios de salud y de educación con calidad, y en donde se respetan los derechos humanos.
Colaboración OPS
La OMS informa, además, que la quinta parte de las mujeres en el mundo son objeto de violencia en alguna etapa de su vida, lo que es causa de altos índices de discapacidad, 12% más intentos de suicido y altas de tasas de mortalidad. Se estima que el mayor porcentaje de casos denunciados pertenece a individuos de bajo estrato social, pero este tipo de violencia no respeta edad, raza, religión, clase social o país, conforme a "Violencia intrafamiliar. Un punto de vista", un artículo de la Acta Pediátrica de México, publicado en la reciente búsqueda de Central de Inteligencia Médica "La violencia intrafamiliar.Análisis de una epidemia global".
"WHO Multi-country Study on Women's Health and Domestic Violence against Women, el primer estudio sobre la violencia doméstica realizado por la OMS en zonas rurales y urbanas de diez países, otro de los documentos ingresados en esta búsqueda de CIM, pone de manifiesto que la ejercida por la pareja es la forma de violencia más común en la vida de las mujeres, mucha más que las agresiones o violaciones perpetradas por extraños o simples desconocidos. Este estudio revela, asimismo, que la probabilidad de que una mujer padezca mala salud o problemas físicos o mentales es dos veces superior en las mujeres maltratadas, aun cuando los episodios de violencia se remonten a varios años atrás. Los índices de violencia física o sexual oscilan entre el 15 por ciento en Japón, hasta 71% en Etiopía, y las encuestas en los Estados Unidos informan que entre un 10% y un 34% de las mujeres han sido físicamente agredidas por su pareja.
Pero, ciertamente, "Involving the Health Care System in Domestic Violence: What Women want", una investigación publicada en Annals of Family Medicine", destaca una grave falencia del personal sanitario en los casos de violencia familiar, aun en países desarrollados. Manifiesta que a pesar de las numerosas y crecientes asociaciones médicas, agencias gubernamentales y fundaciones recomiendan el uso rutinario de detección para la violencia doméstica, muchos médicos no siguen estas advertencias por falta de conocimiento, información inadecuada o temor de ofender a sus pacientes.
Si le interesa el tema, ingrese ahora en "La violencia intrafamiliar.Análisis de una epidemia global". Hallará muchísimos documentos que ahondan en la prevención y el tratamiento de este grave y en crecimiento problema de salud pública.
